Rapa Nui (II) – De moais y petroglifos

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Los moai son esculturas antropomorfas extraídas de la ladera del volcán Rano Raraku. Pesan varias toneladas y pueden alzar desde los 2 metros de alto hasta los 11 metros que mide el moai más grande jamás erguido, llamado Paro. Existe otro moai aún más grande, de 21 metros y 270 toneladas, llamado Te Tekanga, que aún reposa en el lugar de la ladera en el que comenzó a esculpirse. Existe la teoría de que lo abandonaron antes de terminarlo cuando se dieron cuenta de que no podrían moverlo a ningún sitio por su tamaño descomunal.

Rano Raraku

Los brazos del moai se esculpen posados a ambos lados de su vientre, en una postura que en la cultura polinesia representa respeto. Hay algunos moai que están semienterrados y otros están completamente al aire. De los que están semienterrados (sobre todo en la ladera del volcán Rano Raraku, cerca de la cantera), se estima que sólo sobresale un tercio de su tamaño total, que corresponde a la cabeza y parte del torso. El tronco está enterrado varios metros.

De los moai que no están enterrados, numerosos se encuentran en unas plataformas llamadas Ahu, dispuestos bien individualmente o en grupos. Otros moai no están semienterrados ni tampoco en una plataforma, por lo que eran más inestables (o más vulnerables) y varios se encuentran a lo largo de la isla tumbados y partidos en pedazos.

Un moai está «completo» cuando el conjunto dispone de:

  • El moai, elemento principal, cuyo cuerpo puede estar labrado con diferentes motivos ornamentales.
  • El pukao o sombrero, obtenido de otra cantera de material rojizo en el cráter de otro volcán llamado Puna Pau. Esta cantera se destinaba únicamente a obtener pukaos, que posteriormente se disponían encima de las cabezas de algunos moais. En la foto de abajo, al anochecer, se observan -con esfuerzo- tres pukaos que quedaron abandonados en la cantera.

Cantera Pukaos Puna Pau
  • Los ojos del moai, realizados con material de coral blanco y de color (obsidiana o roca roja), y que representaban que el moai estaba «vivo».

Los moai se esculpieron y dispusieron en sus respectivas ubicaciones antes de la llegada de los primeros exploradores europeos, probablemente entre los siglos XIII y XVI.

Significado de los moai

Aunque no existe la certeza, es comúnmente aceptada la teoría de que los moai representaban a los antepasados de los habitantes de la isla, y podían ubicarse en plataformas o Ahus cerca del mar, que así cumplirían la función de altar. Su disposición sigue un patrón general:

  • Moais en la ladera del volcán Rano Raraku, cerca de la cantera: mirando hacia el mar.

  • Moais en los Ahus: miran hacia dentro de la isla.

Cuando a los moais se les colocaban sus ojos entonces representaban a los antepasados (Aringa ora o Rostro viviente) observando y cuidando de los habitantes de la isla (por eso miran hacia adentro desde los Ahus).

En la isla había diferentes clanes que competían entre sí, y es lógico pensar que los Ahus estaban asociados a uno u otro clan. En las guerras entre clanes los Ahus eran objetivos militares pues dañarlos representaba perjudicar el linaje ancestral del clan rival.

Como transportaban a los moai

Uno de los enigmas aún por resolver. Como en la isla no había árboles de madera recia, no parece plausible la construcción de grúas u otros elementos constructivos complejos que facilitasen el traslado e izado de esos tremendos bloques de roca. Históricamente se dio por válida que se utilizaban troncos de árboles a lo largo de carreteras (caminos excavados en el terreno) de forma que los moai eran empujados horizontalmente sobre esos troncos que servían como ruedas, usando (o no) un trineo. Quizá hayas visto en algunas películas transportar barcos con un método similar (como en la deliciosa y demencial Fitzcarraldo de Herzog, o en la serie Vikings)

El dueño del hospedaje -si, los desayunos daban para mucho y yo era uno de sus pocos huéspedes en aquellos días- me dijo, quizá para añadir a la mística, que los moai eran transportados por telequinesia. Que esas facultades se han perdido en los hombres de hoy en día, pero que en tiempos remotos, había personas que tenían ese don de transportar objetos de un lado a otro con el poder de su mente o espíritu. Ante mi socarrona perplejidad, añadió que hay un moai ubicado en un acantilado, y que no hay otra explicación posible de cómo fue trasladado allí. Yo nunca ví dicho moai ni he encontrado ninguna referencia al mismo, aunque quizá se refiriese al moai sumergido, que no deja de ser una réplica turística.

También se puede considerar la teoría de los Antiguos astronautas, de la que Erich von Däniken es propulsor, según la cual la tecnología existente en la época era insuficiente para lograr el transporte de los moai, y por tanto tuvieron que ser agentes externos (extraterrestres) los que lo hicieran. Yo intento respetar a todo el mundo, cada uno es cada uno.

Mi teoría favorita es que los nativos hacían a los moai «caminar». Diversos estudios apoyan la teoría del ingeniero Pavel Pavel, según la cual los moai eran transportados erguidos, con cuerdas atadas alrededor de su cabeza, de forma que grupos de personas dispuestos alrededor de la estatua tiraban y soltaban alternativamente de ella, haciendo que pivotase sobre sus laterales pero a su vez avanzando lentamente.

Petroglifos

Como en tantas otras culturas, los rapanui usaron grabados en piedra para representar elementos de su cultura, los famosos petroglifos. Los más numerosos se encuentran en la aldea ceremonial de Orongo, en la cima del volcán Rano Kau.

Petroglifos Orongo

En la foto siguiente, el petroglifo que se ve en el borde de la roca arriba a la derecha es el más importante, pues representa al Tangata Manu u Hombre pájaro.

Pu O Hiro o la roca trompeta

Cerca de la playa de Anakena, donde residían los Ariki o reyes, se encuentra una roca muy especial: es llamada Pu O Hiro, y presenta una serie de cavidades interconectadas entre sí.

Pu O Hiro

En la parte superior hay un orificio con el borde muy desgastado. La leyenda dice que se soplaba por dicho orificio y la roca emitía un sonido muy característico que se podía oír a mucha distancia. Hay quien dice que se usaba para convocar a los diferentes clanes, aunque también se podría haber usado como instrumento mágico para ayudar a la fertilidad, o hacer que los peces se acercasen a la orilla.

Pu O Hiro

Fui a visitarla con un par de chicos noruegos con los que entablé amistad en esos días, y aunque lo intentamos varias veces, lo cierto es que ninguno de nosotros hizo sonar un colín.

Pu O Hiro

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